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Cinco mitos y verdades sobre los juguetes sexuales
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La inclusión de juguetes en la vida sexual depende de la decisión personal y de pareja, descubre si lo que crees es verdad o sólo un mito
Cuando se habla de juguetes sexuales hay muchas creencias que, en su mayoría, pueden resultar falsas. Los sex toys son accesorios que ayudan a complementar la vida sexual de una persona o de una pareja.
La variedad de productos que se encuentran en las tiendas especializadas es amplia, no se limita a los consoladores, como tampoco es única la razón por los que se decide incluir este tipo de artículos a la vida sexual.
El especialista en sexualidad, Cory Silverberg (coautor de ‘The Ultimate Guide to Sex and Disability’) desmitifica algunas creencias sobre los juguetes sexuales:
¿Los juguetes sexuales sólo para personas que tienen una vida mala sexual o no tienen vida sexual?
No, los juguetes sexuales son para todo tipo de personas. El uso de ellos depende del gusto personal y aceptación en la pareja.
¿Los juguetes sexuales hacen del sexo algo antinatural?
La idea de que el sexo no sea natural viene de creencias inculcadas; “los juguetes sexuales no son animados por las baterías, sino por la imaginación, y usar juguetes sexuales es tan natural como las personas los usen”, indica el sexólogo Silverberg.
¿Los juguetes sexuales son perversos?
Los juguetes sexuales no hacen que el sexo sea algo perverso, usarlos no te define como persona.
¿Pueden causar daño al cuerpo?
La única manera en la que los juguetes sexuales podrían hacer daño a tu cuerpo es si son usados sin higiene. Como buena práctica sexual debes de cuidar su limpieza.