Piensa con cabeza fría, no caigas en juegos mentales y mitos, que la pasión no te haga cometer errores. Mucha atención.
No consumas bebidas alcohólicas
Las duchas vaginales no son la salvación. Esto es perjudicial para tu salud. Aunque se dice que el trago te ayuda a desinhibir todas tus emociones, también puede hacer que pierdas el control de tus actos, haciendo que la confianza que tengas con tu pareja se vaya al extremo. Esto puede hacer que practiques actos sexuales riesgosos que con seguridad en un momento de sobriedad no harías.
No caigas en estos mitos. Si tuviste sexo sin protección este tipo de alternativas no son la solución para prevenir una enfermedad de transmisión sexual, o una infección urinaria. La única forma de no poner en riesgo tu salud sexual es mediante los preservativos.
No reutilices condones
Estos métodos anticonceptivos están diseñados para utilizarlos una sola vez y en un solo acto, seguido de esto debes desecharlos. No es posible volverlos a utilizar si recurres a lavarlos, o si los usas más tiempo después de que tu pareja haya eyaculado, su material puede desgastarse y las consecuencias pueden ser inevitables.
El sexo oral y anal no disminuye el riesgo de contraer enfermedades
Algunas personas piensan que cuando se practica el sexo de esta manera se disminuye la probabilidad de contraer enfermedades venéreas, esto es mentira, cuando se recurre a estos métodos tienes la misma probabilidad de contagiarte de gonorrea, VIH, y clamidia entre otras.